Descubre cómo el Test del Informador se convierte en una herramienta crucial para los profesionales del trabajo social, permitiendo la detección oportuna del deterioro cognitivo.
En el ámbito del trabajo social, la detección temprana y la evaluación precisa de condiciones como el deterioro cognitivo son fundamentales para brindar un apoyo efectivo a los individuos y sus familias. El deterioro cognitivo puede manifestarse de diversas formas, desde problemas de memoria hasta dificultades en el razonamiento y el juicio. Estas condiciones pueden tener un impacto significativo en la vida diaria de las personas, afectando su capacidad para funcionar de manera independiente, mantener relaciones sociales y realizar tareas cotidianas.
La evaluación precisa implica la utilización de herramientas y técnicas estandarizadas para medir el funcionamiento cognitivo de una persona. Esto puede incluir pruebas de memoria, atención, lenguaje, habilidades visuoespaciales y funciones ejecutivas. Además, es importante considerar el contexto cultural y social de la persona, así como cualquier otra condición médica o psicosocial que pueda influir en su funcionamiento cognitivo.
Una herramienta valiosa en este proceso es el Test del Informador, un cuestionario diseñado para evaluar el cambio cognitivo en los últimos 10 años de una persona. Este artículo explora la aplicación, la valoración y la relevancia del Test del Informador, destacando su importancia en la labor de los profesionales del trabajo social.
Aplicación del Test del Informador:
El Test del Informador, desarrollado por los expertos Jorm y Jacomb, consta de 26 ítems en su versión estándar y 17 ítems en su versión abreviada. Su aplicación se realiza a través de un familiar o persona cercana al paciente, quien evalúa el cambio cognitivo a lo largo del tiempo. Es esencial elegir un informador válido, alguien con un conocimiento preciso del paciente y sin dificultades que puedan sesgar las valoraciones.
Valoración del Test:
La puntuación del Test del Informador varía entre 26 y 130 puntos en la versión completa y entre 17 y 85 puntos en la versión abreviada. Se establecen puntos de corte para identificar el probable deterioro cognitivo. La validez del test es destacable, con una sensibilidad del 86% y una especificidad del 92% en la versión de 26 ítems, y valores similares en la versión de 17 ítems.
¿Qué Mide el Test del Informador?
Este instrumento evalúa el deterioro cognitivo de una persona en los últimos 10 años. El informador, generalmente un familiar o cuidador, completa el cuestionario, proporcionando una visión única de la evolución del paciente. Las preguntas abarcan desde la memoria hasta la capacidad de aprendizaje y la toma de decisiones.
Cómo Evaluar:
El informador asigna una puntuación a cada pregunta, reflejando el cambio en el paciente en comparación con años anteriores. Se valora tanto la mejoría como el deterioro, proporcionando una evaluación completa del estado cognitivo.
Punto de Corte:
Se establece un punto de corte para identificar el deterioro cognitivo. En la versión completa, se considera deterioro a partir de 78 puntos, mientras que, en la versión abreviada, el punto de corte es 57.
Importancia en el Trabajo Social:
En el trabajo social, el Test del Informador se convierte en una herramienta invaluable. Facilita la detección temprana de problemas cognitivos, permitiendo una intervención oportuna. Además, proporciona una perspectiva única sobre la vida diaria del individuo, complementando otras evaluaciones clínicas.
Conclusión:
El Test del Informador, desarrollado por Jorm y Jacomb, y validado en el contexto español por Morales JM, emerge como una herramienta esencial para los profesionales del trabajo social. Brinda una visión detallada del cambio cognitivo en individuos mayores, permitiendo una intervención centrada y oportuna. En un campo donde la comprensión profunda de las necesidades de los individuos es clave, el Test del Informador destaca como un aliado invaluable en la prestación de servicios de trabajo social centrados en el paciente.
Si quieres más información psicométrica de la escala y acceder al documento descargable puedes consultar el siguiente documento de nuestra web (solo para asociados).
Bibliografía
Jorm AF, Jacomb PA. The Informant Questionnaire on Cognitive Decline in the Elderly (IQCODE):sociodemographic correlates, reliability, validity and some norms. Psychol Med. 1989;19:101522. DOI: 10.1017/s0033291700005742
Morales, Jose-Manuel; Gonzalez-Montalvo, Juan-Ignacio; Bermejo, Félix; Del-Ser, Teodoro (1995). The Screening of Mild Dementia with a Shortened Spanish Version of the “Informant Questionnaire on Cognitive Decline in the Elderly”. Alzheimer Disease & Associated Disorders, 9(2), 105–111. DOI:10.1097/00002093-199509020-00008